18 feb 2011

Los años de mi vida hasta el 2009, fueron muy lindos. ¿Por qué? Porque era una Ornella ficticia, exactamente no tenía idea de lo que pensaba, de lo que quería, de lo que decía, de lo que sentía. Por eso es que defino el 2009 como una Ornella ficticia. En 2010 dejé a ese personaje atras, me di cuenta de que ya no me pertenecía, que era hora de madurar y mirar hacia adelante. La mejor parte de esto, es que no fue nada fácil. Fue un año lleno de llantos, preocupaciones, miedos, y me atrevo a decir que hasta llegué a pensar en el suicidio alguna vez. Ahora entiendo a que venía todo este desastre en mi cabeza, es que me estaba dando cuenta de quién fui todo ese tiempo y quién quería yo realmente ser. Ustedes leyendo esto imaginarán que estoy exagerando, a lo que me encantaría responder que eso sería lo que yo quisiera. Ya no toleraba que mi vida me sea indiferente, y fue eso lo que me jugó en contra. Querer cambiar, de alguna manera, y pretender ser la misma de siempre. Querer sonreir pero por denro llorar, simplemente eso. Dejé de ser la ficticia que era un año antes, pero aún no llegaba a definirme 'yo'. El 2011, dejé de cuestionarme todos los días que es lo que quiero, o como va a continuar mi vida, simplemente lo dejé pasar. Este año puedo asegurar de que estoy bien, no solo eso, también digo que soy feliz. Mi vida ya no es una mierda, y me imagino por qué razón: Soy Ornella real. Me olvidé de esa careta que tenía puesta hace 2 años atrás, la cuál ni siquiera imaginaba que la tenía. Me siento mucho mejor, aunque admitiendolo, me costó muchisimo liberarme de toda la mierda que me hacía mal, exactamente ese proceso me duró un año, el 2010, el año en el cual me sentí peor que nunca, y aún así lo pude superar. Pero todos sabemos que todo lo malo tiene algo bueno, y este año pude entender que fue lo bueno del 2010. No estoy hablando del inolvidable concierto de Green Day, me refiero a dejar todo atrás. Aunque me halla dolido pasar por una etapa así en mi vida, no me arrepiento. ¿Saben por qué? Por que sirvió para aprender, todo ese año me ayudo a entender que no todo en la vida va a ser de color rosa, creo que en ese periodo maduré, y muchisimo. Y sé perfectamente que recién soy muy chica y me falta muchísimo por madurar, que me falta demasiadas experiencias que vivir, pero el escalón más alto ya lo subí, hoy ya sé lo que quiero. Para resumir... 2009, mi imagen ficticia. 2010, un año en el cuál transformé de a poco mi persona. 2011, orgullosamente mi imagen real.