Todo el tiempo mentiste. Todo el tiempo te creí. ¿Qué es lo que más me molesta de todo esto? Es que te dí el gusto. Te saliste con la tuya, gracias a mí. Terminaste ganando porque YO, solamente yo hice que ganaras. ¿Nunca me lo vas a agradecer? No, por supuesto que no, tan buena mina no sos. Me usaste mucho, y ni culpa sentiste. ¿Cómo pude creerme todo? ¿Cómo pude sentir cariño por vos? ¿Cómo pudiste fingir que yo alguna vez te importe? ¿Cómo pude ser tu amiga? ¿COMO MIERDA PUDE AYUDARTE A GANAR?. Son demasiadas las preguntas que me hago, pero la más frustrante de todas es... ¿Cómo puedo quererte todavía sabiendo que sos tan falsa? Primero me tendrías que pedir perdón, por haber contado algo serio que te confié. Y después, decirme gracias, por haberte dejado obtener lo que querías. Pero no, eso nunca va a pasar. Porque no te importo un carajo. Me decepcionaste muchísimo. Y al final después de todo... es verdad, eras una mierda. ¿Me atreví a negarlo? Sí, cada vez soy más estúpida.